Amanece, voy a tu
encuentro.
Saludan mis pies,
sonríe mi cuerpo,
Te acercas, aún con
respeto, improvisas una caricia tierna.
Ha pasado tanto
tiempo.
Buscas mis huellas,
juegas alrededor, dudas.
¿Serán de ella?
Son profundas y tú extrañas aquellas, tan livianas como eran.
Son profundas y tú extrañas aquellas, tan livianas como eran.
Soy yo, si.
Cargada de vida, que ya me pesa.
Momentos.
Un grano de arena,
una cresta de espuma,
Una brisa que se
transforma en viento.
Amanece, vienes a mi
encuentro.
¡Precioso, Asun! Un reencuentro esperado y muy especial, creo.
ResponderEliminarAbrazos.
HOla Izaskun, este es un reencuentro con el mar, con la arena de la playa y el viento suave de la costa. Algo muy especial para los de tierra adentro.
EliminarAbrazos.
Bonito reencuentro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Rafael, los reencuentros amables como este son bonitos y esperados, en este caso la vuelta al mar.
EliminarAbrzos
Bello reencuentro, Asun, un saludo.
ResponderEliminarMi querido Tiguaz fue mi reencuentro con el mar, tu disfrutas de él a diario, pero los madrileños no tenemos ese privilegio a nuestro alcance.
EliminarUn beso grande, sobre todo por acordarte de mi.