Acoso. La RAE
nos da la definición de esta palabra: Acción
y efecto de acosar, y acosar: Perseguir, sin darle tregua ni reposo, a un
animal o a una persona. Perseguir, apremiar, importunar a alguien con
molestias o requerimientos.
No sé si habrá
un acoso mejor o peor que otros. Pero entre todos me parece especialmente doloroso
y cruel el acoso escolar.
Es difícil trazar
una línea entre lo que pueden parecer bromas normales entre escolares, ya se
sabe los niños son especialmente irónicos y crueles. Si pero dentro de esta
premisa de normalidad debe haber un límite. Cómo saber cuándo se ha pasado este
límite, no es fácil, dependerá de cada caso individual, dependerá de quien lo sufre
y de quien lo realiza.
Pero cuando un
niño vuelve a casa asustado, no quiere ir más al cole, o cambia en sus
actitudes y ritmo de estudios y de actividad escolar y extraescolar, hay que
pensar que algo está pasando.
He tenido la
ocasión de acercarme a esta problemática a raíz de leer a una mujer, blogera
como yo, y escritora con libro publicado. Pero sobre todo madre, y madre que
sufre a través de su hija este problema. De su mano he sabido algo más y quiero
compartirlo.
Lo podéis
escuchar de primera mano a través de un programa de radio donde ella daba la
entrada para abordar el problema:
Yo os hago un
resumen aproximado de lo que allí se dice, y como yo lo he entendido:
¿Cómo actuar?
¿Qué hacer y por dónde empezar?
He sabido de
una triple A, pautas para enfrentarse al problema:
- Acoger:
Debemos escuchar a los niños, y dar importancia a lo que nos cuentan. Siempre
que un niño se queja, tiene razones para ello. Quizá no debamos magnificar el
asunto, y no delante de ellos, pero debemos desplegar todas las antenas y
observar el alcance de los hechos.
- Apoyar: hay
que hacer ver a los niños que estamos a su lado, que estamos vigilantes. No
solo nosotros, los familiares, los amigos. Hacerles entender que no es culpa
suya. Pero también dejarles el protagonismo a ellos. Ellos son los acosados, y
ellos tienen que salir de la situación, con nuestro apoyo incondicional. Pero
ser ellos los que sepan que han salido adelante, poniendo freno por sí mismos.
- Actuar, por
último, y después de escuchar, prestar nuestro apoyo, debemos actuar,
generalmente los niños acosados, son eso niños. Por tanto menores, por ello
somos los padres los que tomaremos las iniciativas pertinentes, a través de los
cauces propios para ello. Pero los chicos deben saber que se está haciendo, que
hemos iniciado el camino para la solución.
Este camino
empezara por los más cercanos al niño:
-El profesor
tutor, se le pondrá en conocimiento la situación.
-Jefes de
estudios, coordinadores pedagógicos.
-La dirección
del centro.
Si las
aptitudes de todos ellos son esquivas, no nos convencen, son en suma
superficiales y no nos dan un compromiso de actuación, la petición se hará por
escrito y se esperara una respuesta.
-El registro: Si
hay demora en la contestación, se formulará de nuevo la exposición del caso y
se pasará por el registro.
Este escrito
deberá contener de manera clara todos los datos posibles. Cuándo, y con qué
frecuencia ha pasado, dónde (patio, pasillos). Concretando al máximo quién lo
hace, de forma concisa pero contundente. Sin olvidar la educación, pero
pidiendo una actuación al respecto. (Yo solicito que el centro actúe, tome
medidas, etc.)
-La
inspección: se adjuntarán todos los documentos que tengamos sobre el caso,
posibles notas escritas acosando. Testimonios de compañeros, o incluso de padres
de alumnos que saben algo del tema.
- Comisarías
de Policía, recomendablemente las de policía nacional, pero también las autonómicas.
- Fiscalía de
menores, que corresponda según la zona.
Tanto en
comisaría, como en la fiscalía se denunciará a las personas acosadoras, con
nombre y apellidos, incluso si son menores, se indicará el nombre y apellidos
si se conoce quienes son.
Se puede
denunciar también al centro, aduciendo que no han dado respuesta a nuestras
peticiones.
Y más o menos
este puede ser el camino a seguir en caso de que desgraciadamente nos
encontremos viviendo esta pesadilla.
Ánimo a todos los niños que en este momento estén pasando por ello.
Como todas, esta batalla también se puede vencer.
Solo me resta decir que hay organizaciones que se ocupan de ayudar, informar y de algún modo prstar ayuda sobre todo esto.
Su web es: http://www.noalacoso.org/
Su teléfono: 683 559 883
Solo me resta decir que hay organizaciones que se ocupan de ayudar, informar y de algún modo prstar ayuda sobre todo esto.
Su web es: http://www.noalacoso.org/
Su teléfono: 683 559 883
Asun, 27 de Octubre de 2013