GPS: ¡glups!
Tanto visitante inesperado era raro. Años sin
ver cruzar esa verja y ahora todos querían saber algo más sobre ella, incluso
hacerse una fotografía a su lado.
Hace tiempo pensó que
esto ocurriría tarde o temprano, pero como ya iba siendo más bien “muy tarde”
dejó de considerarlo posible.
¡Malditos aparatos del demonio!
GPS, para ella no tenía mayor significado que
algo parecido a la onomatopeya de cuando alguien traga saliva en situaciones
embarazosas: glups!
Situación en la que
estaba ella, después de mandar sus cuentos semanales sin remite por correo, la
primera vez que se le ocurre utilizar un ordenador ¡zas! gepeseada.
Asun ©27 de febrero de 2014
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Se vende casa.
Y allí sigue, en silencio, acumulando polvo,
junto al proyector de cine, el barco pirata y la nave espacial. Un torbellino
de escenas de su infancia desfilaron por su cabeza: en la cocina viendo
proyectados en los azulejos blancos que hacían de pantalla, toscos dibujos de
caperucita y un lobo acechante. Llantos inconsolables cuando el barco pirata
cayó al suelo y se partió en mil pedazos. Pedazos que su padre pegó
pacientemente para que volviera a surcar los mares de su imaginación. Un día
interminable de verano, todos los niños de su calle esperando ver despegar su
nave espacial. Y desde el balcón los ojos de su madre, chispeantes, disfrutando
tanto como ellos.
"No, definitivamente, no puedo vender la
casa".
Asun©14
de febrero de 2014
De despojito nada. Me ha gustado mucho. Destila melancolía y añoranza. Difícilmente tu relato no va a conectar con todos los que llevamos ya la mochila algo cargada en este viaje. Enhorabuena. Mucha suerte para los próximos :)
ResponderEliminarGracias, Juan Antonio, yo tenía esa sensación al leeros a vosotros.
EliminarMe encanta ver tu imagen con esa carita al lado de la tuya.
Besos a los dos.
Hola, Asun.
ResponderEliminarComparto la opinión de Juan Antonio, que me ha ganado por la mano. De despojito ná de ná.
Me gustan esas cosas que quizá no se puedan vender ni comprar, pero que dan sentido a nuestras vidsa: los recuerdos.
Bien, Asun, muy bien... quizá la próxima semana sea la tuya, ¡ojalá!
Un beso muy grande.
Bueno por nosotras que no quede, la semana que viene estaremos allí, y algún día tenemos que tener la recompensa...
EliminarGracias siempre por estar a mi lado.
Muy bueno, Asun. La verdad que muchas veces no nos desprendemos de cosas que nos pagarían muy bien, pero que nunca podrían alcanzar el precio emocional que conllevan. Como por ejemplo el libro Cachitos de amor 3, que ya lo tengo en casita y que un pajarito me ha dicho que en él sale un micro tuyo. Ya te comentaré cuando lo lea, con ganas ya de encontrarme con él y enhorabuena por la parte que te toca. Besos.
ResponderEliminarPues si hay cosas que tienen un valor incalculable y nos son imprescindibles, son esos tesoros de los que yo hablo tanto.
EliminarY mira compartimos algo más, esa publicación que yo aún no tengo, pero que seguro es una delicia.
Un beso grande.
Ya lo encontré. Sí, lo había leído 'Amor con síndrome'. Precioso, romántico, educativo, lo tiene todo, me encanta.
ResponderEliminarGracias, eres muy amable, yo creo que me quedó un poco duro, a pesar de querer ser tierno. Está basado en un pareja que veía en el metro, los dos eran Down.
EliminarBesitos
Jo Asun me temía un desahucio pero no. A mi me ha resultado muy tierno.
ResponderEliminarA ver la semana que viene...
Por cierto, aún no sé la frase que es.
Un beso
No se me había ocurrido, pero claro con los que vemos todos los días en las noticias, no me extraña que te lo temieras.
EliminarMe alegro de que al final te haya gustado.
La frase no me acuerdo ahora, pero es muy cortita, eso si lo recuerdo.
Besos
Ayyy los recuerdos y los r4eincones de cada casa!! Me ha encantado el final de tu micro, no me lo esperaba. Felicidades.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Efectivamente los recuerdos permanecen en los sitios, y parece mentira como cualquier detalle nos lleva a otras épocas.
EliminarGracias por pasarte.
Besos
¿Cómo es eso de "despojito" Asun?, de eso nada de nada! es un micro que llega hondo, es un viaje al pasado, a la infancia....remueve sentimientos como ese torbellino del que hablas. A mí me ha llegado y no lo digo por animar, lo digo porque ha conectado mucho conmigo y con mi manera de ser.
ResponderEliminarY no, esa casa (de momento) no puede venderse, la persona aún no está preparada para deshacerse de tanto recuerdo...
Suerte la próxima!
;)
Gracias Pulga, que verdad es esa, estamos atados a los lugares a través de lo que hemos vivido en ellos.
EliminarUn beso grande.
Me uno a la opinión de la peña. De despojito nada, muy digno, muy nostálgico y con ese giro final que inclina la decisión a mantener los recuerdos.
ResponderEliminarBien Asun. Un beso.
Gracias guapetón, a partir de ahora los llamaré "despojos", así con todas las letras, ya me siento una más entre todos.
EliminarBesos
Pues me ha gustado mucho Asun. De como los objetos acaban tan impregnados de nuestras vidas que se hacen inseparables.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Miguel Ángel, así es, nuestras cosas terminan siendo ya parte de nosotros.
EliminarUn abrazo grande.
Buen intento con sabor a nostalgia, a pedacitos de vida y con sorpresa final. Un abrazo,
ResponderEliminarGracias Esperanza por tus palabras y tu visita. En este concurso REC he participado ocasionalmente, pero ahora con esto de los despojos me estoy animando más.
EliminarBesitos
Precioso, lleno de nostalgia. Besos. Gloria Arcos
EliminarGracias Gloria, es bonito escribir sobre sentimientos que todos compartimos.
EliminarBesos
Hola Asun, pues a mi me gusta, me he imaginado en esos azulejos aquellos ratos con mi 'cinexin' y como soy de las que les cuesta tirar las cosas, me sientoi plenamente identificada con tu protagonista. Un beso
ResponderEliminarJusto, el cinexin es del que hablo, esas películas tan rudimentarias y que hacían las delicias de todos nosotros.
EliminarAy cuanta nostalgia, verdad?
Un beso grande
Abrazo grande.
ResponderEliminarY todo lo que te estaba escribiendo se ha borrado, snifff
ResponderEliminarQue me gusta tu blog, Asun, y que eres muy maja.
Abrazo
Tranquila, la tecnología no nos acompaña a veces y se rebela.
ResponderEliminarMe alegro de verte aquí.
Besos grandes.
Jaja Asun a veces no podemos claudicar ante el progreso tecnológico nos engulle antes de poder evitarlo.
ResponderEliminarAy el progreso, es necesario, pero en parte nos complica la vida.
EliminarBesos grandes
Hola, Asun.
ResponderEliminarPrimero, un consejo: da un espacio a cada micro... Quiero decir que hagas una entrada en la página principal del blog y luego, si quieres, te los traes todos juntos aquí. Si no va a ser un follón.
Segundo, en cuanto al micro de esta semana, creo que es muy divertido aunque ya sabes que a mí me gustan las tecnologías y, aunque tengan esos inconvenientes, dan muchas alegrías.
Unos besos, guapa.
Y suertísima para la semana que viene.
Ya creo que los pasaré a la pag principal.
EliminarYa se que tu eres la reina de la tecla, pero otras como yo vamos pasito a pasito.
Besos grandes.
Qué lío me he armado...no encontraba el sitio donde comentarte este último, jajaja
ResponderEliminarAsun, los cuentos hay que mandarlos todos con remitente, si no mira lo que pasa...
Un abrazo y suerte para el próximo.
Pues gracias por tu paciencia, al final has dejado el comentario.
EliminarRespecto al micro, si es mejor dejar el remite claro. Si hay que hacerse famosos pues nada, nos hacemos.
Besos guapetona.
Por dio, me ha pasao como a tu relatos, estoy perdia. ¿que trabajo me ha costao encontrar donde poner el comentario, jajajajaja.
ResponderEliminarEl micro me ha gustado mucho Asun, pero el Carnaval ya se ha pasao y los Santos Inocentes también,jajajajaj.
Besicos muchos.
Si ya he aprendido la lección el próximo despojo irá a la página principal.
EliminarUn beso querida y gracias por tu buen humor.