Páginas

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Olviditos

     Al abrir el contenedor, se dio cuenta de que estaba empezando a olvidar el nombre de las cosas. Miraba aquellos objetos sin poder nombrarlos. Esto le atormentaba sobremanera. Sin embargo recordó tranquilamente, para qué los había utilizado. Algo  fino de afilado corte, que acarició, igual que cuando lo hundió en el corazón de ella. Un cabo de cuerda, fuerte y ancha, con la que le inmovilizó brazos y piernas. Un mechón de algo rubio. Una especie de fundas, de las cuales solo necesitó una para introducirla antes de tirarla al canal.
     Imposible, no era capaz de recordar.


     A media mañana, apesadumbrado volvió al sótano, repentinamente miró al contenedor y triunfal dijo casi gritando: Baúl, cuchillo, soga, pelo, bolsas.

Asun©2 de septiembre de 2015